Enzo Pérez es personal trainer y modelo fitness. El entrenador lleva dos décadas vinculado al mundo del entrenamiento y ha trabajado con figuras del espectáculo como Laurencio Adot, Diego Ramos, además de modelos y empresarios de renombre. Hoy, desde su lugar como coach e influencer del bienestar físico y mental, nos cuenta su recorrido, su visión del fitness y cómo equilibra la estética con el propósito.
Fran Vidal Espectáculos dialogó con Enzo sobre su trabajo y estilo de vida:
Cuándo y cómo nació tu pasión por el entrenamiento?
Mi pasión por el entrenamiento nació en la adolescencia. En ese momento descubrí que mover el cuerpo no solo transformaba mi físico, sino también mi mente. Sentí que entrenar me daba claridad, disciplina y confianza. Con el tiempo, entendí que era una herramienta de crecimiento personal que iba mucho más allá de lo estético.
¿Qué te llevó a elegir el camino del fitness como estilo de vida y profesión?
Lo que me llevó a elegir este camino fue comprender que el fitness no es únicamente entrenar, sino un estilo de vida integral. Vi que podía transformar la calidad de vida de las personas, y eso me motivó a profesionalizarme. Elegí esta profesión porque me permite inspirar, guiar y acompañar a otros a lograr versiones más fuertes y saludables de sí mismos.
¿Qué es lo que más disfrutás de entrenar a otras personas?
Lo que más disfruto es ver la evolución. Y no hablo solo de los cambios físicos, sino de la transformación interna: cuando alguien gana confianza, mejora su energía o recupera hábitos que pensaba perdidos. Ese proceso de superación personal es lo que me confirma, cada día, que elegí bien mi vocación.
¿Qué consejo le darías a alguien que quiere sostener la constancia en el entrenamiento?
La constancia nace de entender el “para qué”. Cuando tenés claro por qué entrenás, ya sea por salud, bienestar o superación, se vuelve más fácil mantener la disciplina. También recomiendo enfocarse en pequeños logros diarios, en lugar de metas inalcanzables. Es en la suma de esas pequeñas victorias donde se construye el verdadero cambio.
¿Ofrecés planes de entrenamiento a distancia? ¿Cómo adaptás las rutinas a distintos perfiles?
Sí, ofrezco planes de entrenamiento a distancia, aunque hoy no es mi foco principal. De todas formas, siempre trabajo con rutinas personalizadas. No es lo mismo alguien que recién empieza, una persona con hábitos muy sedentarios o alguien con experiencia previa. Mi criterio es adaptar cada plan a la edad, los objetivos y los hábitos de la persona, para que el entrenamiento sea realista, progresivo y sostenible en el tiempo.
¿Te gusta trabajar como modelo fitness?
Sí, me gusta porque es una forma de mostrar resultados y transmitir un mensaje visual de disciplina y compromiso. Pero lo veo como un complemento, no como un fin en sí mismo.
¿Existe presión en el mundo fitness por mantener cierto tipo de físico? ¿Cómo lo manejás?
Sí, esa presión existe. La imagen juega un rol importante, pero aprendí que lo fundamental es la coherencia. Yo entreno y me cuido porque lo disfruto y porque me da salud, no solo por la apariencia. Cuando ponés el foco en el bienestar integral, el físico se convierte en una consecuencia natural, y la presión se transforma en motivación.
¿Qué proyectos tenés en el horizonte?
Tengo varios proyectos en marcha, algunos vinculados directamente al entrenamiento y otros que exploran diferentes ámbitos. Lo que sí tengo claro es que, más allá de esas nuevas etapas, el mundo del fitness siempre va a ser parte de mi vida.