Diego Crevacuore es músico y cantautor argentino, pero sus inicios fueron en el mundo de la actuación. Participó en varias novelas, después en obras de teatro, musicales y cine, medios que lo llevaron a redescubrirse en la música.
El joven es ciudadano de origen italiano, con visados de USA y Canadá. Se formó profesionalmente como magíster en economía y gestión del turismo (MBA UBA, 2020), es licenciado en administración (UBA, 2016) y defensor de los animales. También realizó trabajos artísticos de pintura en el país Belice, y en sus viajes por América trabajó como guardavidas en EE. UU (Cruz Roja), bartender en Perú y personal trainer, entre otros.
Actualmente, Diego se encuentra en etapa de grabación de su primer EP “De adentro hacia afuera” de autoría original, con 3 canciones en formato de sencillos: “Vacío”, “Sol y Luna” y “Hoy”.
El artista dialogó en una entrevista con Fran Vidal Espectáculos:
– ¿Cómo estás viviendo esta etapa desde lo artístico? ¿Cómo te afectó la cuarentena para trabajar?
-Gracias a Dios, y a mi esfuerzo siguiendo el consejo de mis padres terminé muchos estudios que me permiten costearme de distintas maneras hasta que sólo pueda vivir de la música; lo que sueño hoy.
En la cuarentena pude sanar la herida que me dejó el perder un papá a los 16, me recompuse componiendo “Vacío” haciendo alusión a ese vacío existencial que entiendo -por las luces que tengo al momento- todos tenemos, en algún punto. Digamos que la aproveché como catapulta para hacer con todas mis fuerzas; al punto que me saturé por aquel noviembre. Sumado a eso, terminé una maestría para defender a los animales con una tesis en la UBA. En balance, diría: me potenció por como la decidí tomar (que como leí por ahí, sería como la felicidad; una decisión).
– ¿Sobre tus participaciones en ficciones argentinas, ¿Cuál fue la que mayor experiencia te dejó?
– Considero cada vivencia deja una experiencia, a mí me marcó mucho “La leona” con un tinte agridulce, lo efímeras que pueden ser las grabaciones, el hecho que puedan salir al aire un año más tarde (y cuándo estás en otra), lo irreal de cobrar 20 mil pesos en un día por muchos capítulos y después por meses nada; como la experiencia maravillosa de conocer seres divinos como Nancy Duplaá y que se quede a verte grabar, como que no te pueda gustar el ambiente del todo si no te sentís parte. Quiero resaltar que de las que más aprendí y pude desarrollar fueron siempre las producciones a pulmón.
– ¿Te gustaría hacer más teatro o más cine en tu carrera?
-En primer lugar, me gustaría cine y, en segundo lugar, teatro. Aunque con pocos personajes, quizá 2 o 3 en total. Algo bien dramático, o más bien bien real, casos reales y no tanta ficción que distraiga. Nos sobra realidad en este contexto y etapa que nos toca vivir como para seguir distrayéndonos (más de lo que intentan y ganan por goleada las redes “sociales”). En conclusión, me encantaría, se tiene que dar si debe ser; momento y personas, Dios mediante. Es otra de mis pasiones la actuación, sin duda.
– ¿Qué recuerdo tenés de cuando estudiaste con Agustín Alezzo?
– Su única entrevista y lección final para atreverme a decir que estudié y aprendí con y de él. Me escuchó como media hora en mis veintitantos apalabrando un largo currículum -real más casi eterno- al que remató con una simple y profunda preguntas, de las que me gustan… que la comparto porque considero todo está para compartir en este regalo maravilloso llamado vida: “Para qué tanto?”.
– ¿Por qué amás tanto viajar?
-Soy yo al cien por ciento cuando viajo, fluyo como un río, y estancado estoy así, como en un estanque. Me pongo ansioso, no sé relacionarme del todo relajado, quiero agradar y me sale, y pago el precio claro (y caro, ya que en el arte es más que imposible mentirte). Conozco 37 países y de cada uno me llevo una rica experiencia, viajar es maravilloso.
– ¿Cuál es el objetivo máximo que te planteás para tu carrera?
– Ese es el tema. Soy muy soñador, y como leí ayer… la ansiedad es la irrefutable gana de querer que sea mañana donde me imagino: llenando mi primer estadio. Y para eso, primero debo vivir el hoy, transitar y seguir adelante -como siempre digo y siento (crudamente y con la misma sensación)- con el “estoy empezando” a cuestas. Es lo maravilloso del arte para mí, conocerte más y más, al punto de ver todo como nuevo cada día. Mientras tanto, disfrutar es mi objetivo de corto plazo; y mi amigo, que me cuesta abrazar.
Formación
Diego estudió con profesionales de la actuación como Alezzo Agustín, Moseinco Nora, Doria Santiago, Popovich Lili, Alejandro Fiore, Ricky Pashkus, Moscoso Mario y Echeverría Carlos.
Previamente se formó en lo vocal con De Paula Marcelo, Rowina Casey, Hugo Tenor, H. Amigorena, Lopez Chris. Y estudió composición con la cantautora colombiana Marta Gómez.
Además, se entrenó en la Academia Valeria Lynch, Fundación Julio Bocca, Centro Cultural Rojas, Centro Cultural San Martín, IMTA, entre otros. También realizó acondicionamientos de la voz haciendo fonoaudiología con Héctor Jatzkevich y Elida Do Nascimento.
En lo actoral lo representó Cristhian Quiroga. En la actualidad su manager es Javier Arena y su coach artística Katie Viqueria.
Carrera actoral
Televisión: Esperanza mía, La Leona, Educando a Nina, Violetta 3, Préstico
Series: El Asesor, El amante perfecto, Una razón para vivir
Programas: Ciudad Rock
Cine: Exilio (México)
Teatro: Lluvia & arcoíris, Cruising, Malaui, Mientras Dure, Bullying, Desasosegados
Danza: Showchoirs (De los hermanos Ibarra, Matías y Alejandro)
Publicidad: formó parte de una campaña publicitaria de las peluquerías Prana y Fernet Branca
Videoclips: Caliente, Blue Set (actualmente Armada Paraíso)
Carrera musical
Su instrumento principal es la voz, que acompaña con piano y guitarra.
Comenzó sus primeras grabaciones en el denominado “Del llanto a la risa” (2019), con 3 covers: “She will be loved” (Maroon 5), “When we were young” (Adele) y “Soy como quiero ser” (Luis Miguel).